Ciudad de México (EXCÉLSIOR) lunes 9 de julio de 2012.– ¿No puede pasar un día sin Facebook o Twitter? ¿Se le queman las manos cuando tiene cerca su smartphone o tablet por actualizar sus redes sociales? Tenga cuidado, ya que la ansiedad por estar viendo cada rato sus redes sociales puede hacerle sentir inseguro y frustrado, un mal que va en ascenso, según un nuevo estudio dado a conocer este fin de semana por la Escuela de Negocios de la Universidad de Stanford en el Reino Unido.
La investigación realizada a cientos de usuarios de las redes sociales reveló que más de la mitad de ellos admitió que Twitter y Facebook, entre otros, han cambiado su comportamiento, y la mitad de éstos dijeron que sus vidas habían sido alteradas para mal.
Relegados
Por lo general, los que sufrieron un impacto negativo de los medios sociales dijo que su confianza cayó después de comparar sus logros con los de sus amigos en línea, o si tal o cual persona les escribe a sus amigos y no a ellos.
Dos tercios dijeron que habían encontrado dificultades para relajarse por completo o para dormir después de pasar el tiempo en sus redes sociales, mientras que un cuarto de ellos señaló que se había quedado con dificultades en sus relaciones o el lugar de trabajo después de iniciar algún tipo de plática con confrontación en estos sitios de internet.
La investigación, que fue dada a conocer ayer por la mañana, también demostró el poder adictivo de internet: 55 por ciento de los encuestados señaló que se sentía “preocupado o molesto” cuando no podía acceder a sus perfiles de Facebook, Twitter o correo electrónico.
Más de 60 por ciento de las personas dijeron que se sentían obligadas a apagar los aparatos electrónicos con el fin de tener un descanso, mientras un tercio de los entrevistados afirmó que apagaba y prendía los dispositivos varias veces al día.
“Si están predispuestos a la ansiedad, parece que las presiones de la ley de la tecnología son un punto de inflexión, por lo que las personas se sienten más inseguras y abrumadas”, señaló en el documento Nicky Lidbetter, de la Sociedad Benéfica contra la Ansiedad de Reino Unido, que se encargó de la encuesta.
Tan fuerte como las adicciones
Linda Blair, sicóloga clínica que fue consultada por The Daily Telegraph, dijo: “Creo que una de las claves es que la gente ha empezado a comportarse como si la tecnología los controlara, en lugar de ser al revés. Podemos dejar de lado o apagar los aparatos, pero muchos de nosotros preferimos no hacerlo”, agregó.
En 2011, un estudio encontró que apagar los teléfonos móviles, evitar internet y dejar de mirar o escucar la televisión y la radio puede causar en millones de personas síntomas similares a los observados a las adicciones.